En bicicleta, yo :
- Respeto y comparto la carretera con los viticultores. Trabajan en los viñedos y utilizan los carriles abiertos a los ciclistas para acceder a sus parcelas. Están orgullosos de mostrarme su oficio y sus terruños.
- Los peatones tienen prioridad. Son raros y preciosos, por eso los trato con cuidado.
- Respeto las señales de tráfico. Si dice «alto», me detengo. Ni hablar de ser un rebelde de los viñedos.
- Llevo el móvil y los auriculares en el bolsillo. Para estar seguro, necesito oír bocinas. La música en mis oídos es para la casa. Los atascos son para las bodegas.
- No conduzco en dirección contraria. Es como elegir el vino equivocado, lo evito absolutamente.
- Utilizo los carriles bici. Si no hay ninguno en mi ruta, voy por la carretera, pero siempre con clase y precaución.
Conduzco con inteligencia y sigo las normas.